RENOVARSE Y MORIR

Podría haber titulado este artículo "Grandeza y Decadencia", son numerosos los ejemplos que tengo en mente.

¿De qué se trata ? Nada que ver con el Imperio Romano, pero de todos esos jugadores que estaban a un escalón de la gloria, y por tomar una mala decisión comprometieron su carrera y no llegaron a subir ese último escalón.

La mayoría, los he conocido personalmente por habérmelos cruzado en los diferentes torneos del European Tour. He podido ver de cerca el proceso que ha causado ese descenso al infierno "gólfico".

¿ Cuál era esa decisión ? Qué daño por siempre a esos jugadores, dejando una herida irreversible en sus carreras ya reconocidas, pero aún prometedoras.

Cambiar la manera de mover el palo o dicho más sencillamente cambiar el swing.

¿Pero por qué cambiar su swing? Cuando estos jugadores han ganado varios torneos, incluso han jugado la Ryder Cup, estaban entre los mejores del mundo, por una razón indiscutible para un jugador de nivel mundial: en su palmarés falta lo imprescindible.

Un torneo mayor o un Grand Slam.

Ganar un mayor es entrar en la gloria, todo jugador desde que empieza como amateur, su sueño es ganar un mayor. Si eres europeo, es el Abierto Británico o The Open, si eres americano, es el US Open o quizás el Master.

El ejemplo más ilustre de esos jugadores que conozco, es el del inglés Luke DONALD, que a a sus 35 años, llegó a ser número uno mundial (2011 y 2012), y lideró las listas de ganancias en el PGA Tour (circuito americano), y en el European Tour el mismo año en 2011 (hasta hoy es el único jugador).

Luke DONALD en 2013, después de 16 años con el mismo entrenador (Pat GOSS), decidió cambiar por Chuck COOK.

DONALD eligió a COOK, porque quería mejorar su juego largo y, en particular, el drive, y así, aumentar sus posibilidades en los mayores. El análisis que le decidió a tomar esa crucial decisión, era que cada semana en el circuito gana el mejor pateador, pero no en los mayores.

Chuck COOK era el entrenador idóneo según DONALD. COOK era el coach de Corey PAVIN, Payne STEWART y Tom Kite, todos ganadores de mayores. COOK tenía la experiencia más que suficiente para un jugador del nivel de DONALD.

Pero lo que podía haber sido un final feliz, acabó en tragedia para Luke DONALD, a partir de esa decisión no ha vuelto a ganar ningún torneo, y, hoy en día, figura en el puesto 512 del OWGR (clasificación mundial).

Luke DONALD reconoció recientemente que tomo una decisión errónea por culpa de un mal análisis de su juego.

Mea culpa, máxima culpa. El error es humano y Luke DONALD es un humano.